"Machines That Listen" es su único álbum de estudio, lanzado el año 2010, y del cual escuché un sólo tema en AccuRadio; "It Was Dark and I Welcome the Calm", y ahí quedó la cosa. Pasó el tiempo, y recién en estos días me acordé de ellos, así que decidí adquirir su disco.
The Delta Mirror nació a fines de los años noventa, como un dúo de hip-hop, entre los músicos Craig Gordon y David Bolt, pero como siempre en la vida, muchas veces uno crece queriendo ser algo y en el camino descubre algo distinto que lo atrapa y hace evolucionar, eso les pasó, teclados, efectos de computadora y una adormecida guitarra al estilo shoegaze hicieron de The Delta Mirror algo nuevo, diferente y muy experimental... Poco a poco fueron descubriendo nuevos conceptos, dando como resultado el sonido que tienen ahora y que se expresa en "Machines That Listen", con una gran ambientalidad en el sonido, haciéndonos recordar mucho a géneros como el dream-pop y el noise-rock. Finalmente se unió a ellos la bajista Karrie K, con quien terminaron de definir a su totalidad el divagante sueño que es The Delta Mirror... No hay manera de etiquetarlos... Indietrónica? Shoegaze? Electro-dream-pop? No importa, al final de cuentas es una maravilla.
El grupo no es muy popular, basta con mirar su fan page de Facebook, al rededor de mil fans, pero bueno, eso no es lo que importa, simplemente nos ayuda a darnos cuenta que hay música en donde menos nos lo esperamos, y que esta música sin ser popular puede ser grandiosa, y no, The Delta Mirror no es algo que se haya hecho para adquirir popularidad... Es por amor a la música, es por eso que para alguien como yo que escucha esto, es muy especial, lo sientes personal...
"Machines That Listen" es un álbum conceptual, cada una de las nueve canciones es una historia que ocurre en una habitación diferente de un hospital... Como dicen los chicos de The Delta Mirror en su MySpace; El track número 2, "And the Radio Played On", habla de un anciano moribundo y sus últimos momentos al lado de su esposa, mientras que "Hold Me Down, But Don't Let Me Go" (la número 6), está contada desde la perspectiva de una enfermera de urgencias que da tratamiento a una víctima de arma blanca. Escuchar este disco es como caminar por los pasillos de Bellevue o Cedars Sinaí, escuchando una banda sonora que se re-escribe a diario...
El lado humano de este disco es increíble... Y el sonido es excepcional, sé que si lo adquieren no se arrepentirán.
Tracks:
01- It Was Dark and I Welcome the Calm
02- And the Radio Played On
03- Going To Town
04- He Was Worse Than the Needle He Gave You
05- A Room For Waiting
06- Hold Me Down, But Don't Let Me Go
07- Malpractice
08- We Got It All
09- A Song About The End
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